36 años promoviendo apertura, competitividad e institucionalidad

Hace unos días, ComexPerú cumplió 36 años de vida institucional. Fundada en 1989 por un grupo de empresarios con visión de futuro, su creación respondió a la necesidad de contar con un gremio técnico, moderno y con voz propia para impulsar una agenda clara de apertura económica, competitividad y libre empresa. Entre sus fundadores destacó el liderazgo de Juan Francisco Raffo, cuya convicción en los beneficios del comercio y la inversión como motores de desarrollo marcó (y lo sigue haciendo) profundamente la identidad de la institución. 

En sus primeras décadas, ComexPerú jugó un papel clave en la construcción de la política de apertura comercial del país. Desde el impulso a la firma del Tratado de Libre Comercio con EE. UU. hasta la defensa de nuestra participación en foros como el APEC, el gremio se consolidó como un actor técnico y propositivo en el debate público nacional. 

Hoy, ComexPerú es más que un gremio. Es también un centro de pensamiento, con una capacidad de incidencia sostenida en diversas agendas de política pública: simplificación administrativa, calidad regulatoria, institucionalidad, competencia, salud, turismo, economía digital y más. Nuestra defensa del libre mercado se sustenta en evidencia técnica y una visión que antepone principios al cortoplacismo o intereses particulares. 

En un país marcado por la incertidumbre y la fragmentación, ComexPerú ha mantenido una línea clara, responsable y comprometida con el desarrollo. Su voz tiene peso en las principales discusiones económicas y regulatorias del país. Y eso es fruto de la credibilidad construida con trabajo riguroso, independencia y consistencia. 

Desde estas líneas, un reconocimiento a todos quienes de alguna u otra manera han hecho y hacen que nuestra institución sea lo que es. A sus fundadores, expresidentes, directores, asociados, trabajadores, practicantes y proveedores, quienes hoy están o han estado; a todos ellos, muchas gracias. ComexPerú es resultado del aporte de cada uno de ustedes. 

Celebrar estos 36 años es también renovar nuestro compromiso con el Perú. Con un Estado que funcione mejor, con instituciones que garanticen reglas de juego claras, con una economía abierta al mundo y un sector privado que sea parte activa de la solución a los desafíos que enfrentamos. 

Hoy nos encontramos ante un contexto particularmente desafiante. 2026 será un año electoral decisivo para el rumbo económico del país. En ese escenario, nuestra voz será fundamental para asegurar que la discusión pública valore el aporte del sector privado, la importancia de las libertades económicas y la necesidad de que el Gobierno actúe dentro del marco de una economía social de mercado. 

A todos los que quieran sumarse, bienvenidos. Con su apoyo, podremos seguir liderando las iniciativas que promueven un entorno competitivo, estable y favorable para la actividad empresarial y la inversión privada. 

La misión sigue vigente: tanto mercado como sea posible, tanto Estado como sea necesario.