Un hub logístico es un espacio físico estratégico que sirve como punto clave de conexión en una red de transporte de mercancías. En este lugar, las mercancías se concentran para su almacenamiento, consolidación y redistribución, lo cual facilita una transferencia fluida de carga y mejora la eficiencia en la cadena de suministro. 

El Perú aspira a convertirse en un hub logístico en el Pacífico Sur, mediante la puesta en funcionamiento del megapuerto de Chancay y las ampliaciones en los terminales del puerto del Callao. Estos esfuerzos buscan consolidar carga de naciones vecinas y de regiones del interior del país, a fin de redistribuirlas hacia Asia y Oceanía. 

Para lograr este objetivo, es fundamental trabajar en dos aspectos clave: mejorar la conectividad del eje multimodal Chancay-Callao e identificar nodos productivos que abastezcan de carga a estos puertos, con especial énfasis en Chancay. 

CONECTIVIDAD DEL EJE CALLAO-CHANCAY

Recientemente, el titular del Ministerio de Transporte y Comunicaciones (MTC), Raúl Perez Reyes, señaló la priorización de cinco proyectos de infraestructura vial: la Red Vial N.° 5, el Ferrocarril Lima-Barranca y los corredores viales Ambo-Oyón-Huaura, Huayllay-Acos-Huaral y Huayllay-Canta-Lima. 

La Red Vial N.° 5 abarca el proyecto Evitamiento Chancay-Chancayllo, que busca desviar el tráfico de la zona urbana para mejorar la seguridad vial y la fluidez del tránsito. Con una longitud aproximada de 15 kilómetros, contará con 3 intercambios viales y 9 pasos a desnivel, con una inversión de US$ 120 millones. Asimismo, contempla la construcción del Paso a Desnivel Inferior (PAD) en la Panamericana Norte, con un plazo de ejecución de 8 meses, y el proyecto Par Vial Variante Pasamayo, que implicará la creación de un tercer carril en la calzada de sur a norte de la variante Pasamayo, con una inversión de US$ 175 millones. De este modo, se constituiría un par vial al del serpentín de Pasamayo, con el fin de mejorar el flujo del tránsito de los vehículos a lo largo de la Panamericana Norte. 

Por su parte, el Ferrocarril Lima-Barranca tendrá una longitud de 245.66 km y será operado para tráfico mixto de pasajeros y carga. Ya se le ha otorgado la buena pro y se encuentra en proceso de suscripción de contrato, según el MTC. 

Los corredores viales priorizados también resultan fundamentales para mejorar el transporte de carga. En ese sentido, el corredor vial Ambo-Oyón-Huaura, con una inversión estimada de S/ 1,678 millones, incluirá la construcción de 150 km de la carretera Oyón-Ambo y el mejoramiento de sectores críticos en la carretera Huaura-Sayán-Churín. Se espera que las obras comiencen en el cuarto trimestre de este año. 

Por otro lado, el corredor vial Huayllay-Acos-Huaral, con una inversión de S/ 689 millones, comprende la construcción de la carretera Acos-Huayllay (85.61 km) y se prevé que también inicie obras en el cuarto trimestre de este año. 

Finalmente, el corredor Huaylla-Canta-Lima, con una inversión de S/ 1,697 millones, incluye la construcción de las carreteras Canta-Huayllay (74 km) y Lima-Canta (21 km). La primera etapa de este corredor ya tiene un avance físico del 95% y se espera que su construcción finalice en mayo. Se prevé que la segunda etapa inicie obras en el cuarto trimestre de 2024. 

NODOS PRODUCTIVOS

El estudio Compartiendo las visiones de Perú y China sobre el futuro puerto de Chancay: Explorando oportunidades bajo la Franja y la Ruta, elaborado por el Centro de Estudios sobre China y Asia-Pacífico de la Universidad del Pacífico, ha identificado tres nodos productivos en la zona de influencia de Chancay que serán clave para potenciar la oferta exportable del Perú. 

El primer nodo es el de la zona este, que abarca las provincias de la región selvática, con énfasis en los departamentos de Ucayali, Huánuco y San Martín. El segundo es el nodo central, que incluye los departamentos de Pasco y Huánuco. Finalmente, el tercer nodo es el costero, que engloba las regiones de Lima, Áncash, La Libertad y parte de Cajamarca. 

Entre la oferta exportable identificada, el nodo este muestra un alto potencial para el desarrollo del sector maderero y la producción de café, cacao y palta. Específicamente, las provincias de Tocache (San Martín) y Padre Abad (Ucayali) destacan como áreas líderes en la producción de café y cacao. En el nodo central, sobresale la producción de aguaymanto, mientras que el nodo costero destaca por la alta producción de productos líderes de la canasta agroexportadora peruana, y la provincia de Virú es fundamental para su desarrollo efectivo. 

Asimismo, para el transporte de estos productos desde el interior del país hacia el puerto de Chancay, se identificó cuatro corredores logísticos clave: el corredor costero en las regiones de Lima, Áncash y La Libertad; el corredor Chancay-Pucallpa, que atraviesa Lima, Pasco, Huánuco y Ucayali; y los corredores Monzón-Tingo María y Bellavista-Tingo María, en los departamentos de Huánuco y San Martín, respectivamente, con distancias de 69 y 381 kilómetros, ambos conectados al corredor Chancay-Pucallpa (739 km). 

El puerto de Chancay se perfila como un elemento crucial para impulsar la competitividad logística del país. Sin embargo, su impacto máximo no se asegura únicamente con su construcción. Es imprescindible que el sector público, en colaboración con el privado, intervenga para agilizar la ejecución de obras clave que mejoren la conectividad vial y ferroviaria entre los futuros puertos más importantes del Pacífico sur. Además, se requiere un plan integral para aprovechar al máximo los nodos productivos identificados. Solo así podremos alcanzar nuestro objetivo de convertirnos en un hub logístico para las cargas con destino y origen en Asia u Oceanía.