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LA AGENDA ECONÓMICA
Por Jessica Luna / Publicado en Octubre 04, 2019 / Semanario 1002 - Editorial
El nuevo gabinete ministerial tiene un tremendo reto por delante: retomar el dinamismo del crecimiento económico, único camino para reducir la pobreza y brindar oportunidades a la población. Para lograrlo, desde la Sociedad de Comercio Exterior del Perú (ComexPerú), consideramos que las siguientes acciones son urgentes para reactivar el país y recuperar la senda del crecimiento.
El principal reto es el impulso a la inversión. En términos de inversión pública, es fundamental recuperar la agilidad de un Estado que ha estado aletargado los últimos meses, que se ha llenado de burocracia y pasividad mientras la economía se desaceleraba. Urge ponerse a trabajar, cumplir con las metas y ejecutar la inversión pública. Con ese fin, el acompañamiento a los Gobiernos regionales y locales es fundamental para garantizar una eficiente asignación de los recursos.
Además, urge reactivar la inversión privada, para lo cual se debe generar confianza a través del respeto de principios, reglas claras y predecibles. El destrabe e impulso de los proyectos de inversión minera, infraestructura y conectividad (vial, irrigación, portuaria, aeroportuaria, ferroviaria) son la piedra angular y, sobre todo, quick wins para dar una señal clara de hacia dónde vamos con este Gobierno que tiene plenas facultades. La ejecución del Plan Nacional de Infraestructura para la Competitividad debe ser el norte y, para ello, el liderazgo a nivel presidencial en su monitoreo y seguimiento es clave. En esta materia, la extensión del Régimen de Promoción Agraria es un paso fundamental para continuar con el dinamismo del sector agroexportador, generando inversiones, formalidad, encadenamientos y empleos en las zonas rurales del país.
Otra prioridad debe ser la implementación del Plan Nacional de Competitividad y Productividad, el cual es una ruta clara y de amplio consenso entre el sector público y privado. También se requiere impulsar la facilitación del comercio y la competitividad logística, lo que pasa por acelerar la ejecución de la VUCE 2.0 con la incorporación del observatorio logístico, la implementación del corredor logístico seguro, las plataformas logísticas a nivel nacional, el antepuerto y un truck center.
Además, se debe recuperar la agilidad de un Estado que está inmerso en una excesiva burocracia y tramitología. Un ejemplo claro es la Digemid, cuya ineficiencia solo genera sobrecostos y atraso en la incorporación de nuevos medicamentos y tratamientos, lo que afecta un servicio básico como es el de salud. Para ello, se debe impulsar la eliminación de barreras burocráticas, poderosa herramienta para poner al Estado al servicio del ciudadano, destrabar proyectos y mejorar el ambiente de negocios, así como implementar plenamente el análisis de impacto regulatorio a todo nivel.
Por último, priorizar la agenda de los sectores que dinamizan el desarrollo descentralizado, como es el turismo, que emplea a 1.3 millones de personas (7.7% de la PEA) y representa un 3.8% del PBI. Un verdadero plan de infraestructura turística, así como el plan de manejo territorial de Machu Picchu, deben ser prioridades.
Desde ComexPerú reiteramos nuestro compromiso de seguir aportando con propuestas, basados en la defensa de principios y no en intereses particulares, para hacer de nuestro país uno que genere más oportunidades para todos los peruanos.
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