¿Esto no es lo que estabas buscando?
Vuelve a definir los parámetros de tu búsqueda.
Empresas públicas bajo la lupa: principales resultados
Por Comexperu / Publicado en Mayo 16, 2025 / Semanario 1256 - Actualidad

En 2024, el superávit económico en base a caja de las empresas estatales ascendió a S/ 1,098 millones, mayor al de 2023 (S/ 98 millones), según el BCRP. Sin embargo, si se excluye la operación de capitalización de Petroperú realizada en setiembre del año pasado, se habría registrado un resultado económico deficitario para el conjunto de empresas estatales de S/ 4,656 millones.
Según el Banco Central de Reserva del Perú (BCRP), las empresas estatales no financieras cerraron el año con un resultado económico[1] positivo por más de S/ 1,000 millones, lo que sugiere una recuperación tras los déficits recientes. Incluso Petroperú —históricamente en números rojos— reporta superávit. Sin embargo, detrás de estas cifras se esconden aportes sistemáticos del Estado y mecanismos de financiamiento que distorsionarían el panorama real. Lo que parece un repunte, sería una ilusión contable.
En 2024, el conjunto de empresas estatales no financieras registró un resultado económico positivo de S/ 1,098 millones, según el BCRP. A simple vista, esto marca una mejora sostenida respecto de los años anteriores, que reportaron un déficit de S/ 2,566 millones en 2022 y apenas un superávit mínimo de S/ 98 millones en 2023. Sin embargo, la cifra está fuertemente influenciada por un caso específico: Petroperú. De hecho, más del 100% del superávit reportado proviene de esta empresa, que pasó de pérdidas a un aparente resultado favorable gracias a una masiva inyección de capital público.
El grueso de los ingresos también se concentra en pocas firmas. Solo Petroperú y Electroperú representaron el 70% de los ingresos corrientes del conjunto empresarial. Mientras tanto, otras entidades como Sedapal, Sima Perú o empresas eléctricas regionales presentan resultados mixtos. Esta heterogeneidad es clave: mientras unas pocas empujan los promedios hacia arriba, varias otras arrastran debilidades estructurales que se diluyen en los agregados. Como señala el BCRP, sin la capitalización de Petroperú, el resultado agregado habría sido nuevamente deficitario.
El caso de Petroperú en 2024 es el más llamativo del portafolio estatal. Luego de años de resultados económicos negativos —más de S/ 2,800 millones de pérdida en 2022 y S/ 1,400 millones en 2023— la empresa reportó un superávit de S/ 727 millones. Pero este resultado, lejos de deberse a una mejora en su desempeño operativo, se explica por una nueva inyección de capital del tesoro público por S/ 6,100 millones, a través de los decretos de urgencia N.º 010-2022 y N.º 004-2024.
Sin este aporte, la empresa habría cerrado el año con un déficit de más de S/ 5,000 millones. De hecho, sus ingresos por ventas cayeron en S/ 2,716 millones frente a 2023, y entre abril y julio la producción de la refinería de Talara fue limitada por problemas técnicos. Además, los intereses pagados por el conjunto de empresas estatales alcanzaron los S/ 1,789 millones y Petroperú concentra la mayor parte, dado su peso en el portafolio y su historial de endeudamiento. Lejos de representar una recuperación, el resultado económico de Petroperú en 2024 refleja una situación financiera que se sostiene artificialmente por recursos públicos.
Mientras Petroperú domina la discusión por su volumen e impacto fiscal, otras empresas del portafolio estatal muestran diferentes resultados. Sedapal, por ejemplo, presentó una mejora en 2024, con un resultado económico en base caja de S/ 15 millones. Asimismo, la empresa registró una utilidad neta de S/ 777.7 millones.
Otra empresa clave, Electroperú, pasó de registrar resultados económicos en base caja deficitarios en 2022 (- S/ 219 millones) y 2023 (- S/ 277 millones) a un superávit de S/ 523 millones en 2024. Asimismo, según la información del Estado de Resultados Integrales de la empresa, esta ha generado utilidad neta positiva en los últimos cinco años. Su retorno sobre el capital (ROE) —indicador que mide la ganancia obtenida por cada sol de patrimonio invertido— se redujo más del 40% entre 2022 y 2023, y su utilidad neta cayó a casi la mitad[2]. En 2024, la empresa logró un ROE de 19.4%.
Finalmente, empresas como Sima Perú y otras del grupo "resto de empresas" registraron un resultado económico en base caja deficitario por S/ 697 millones en 2024, revirtiendo el superávit del año anterior. En contraste, las empresas regionales de electricidad reportaron un superávit de S/ 530 millones, menor al registrado en 2023 (S/ 810 millones).
Los resultados económicos de 2024 muestran un resultado mixto del desempeño de las empresas estatales. El caso de Petroperú es el más evidente, pero no el único. Más allá de balances saneados, el verdadero desafío está en replantear el rol de cada empresa pública. ¿Cumplen un objetivo estratégico o prestan un servicio esencial que justifique su permanencia? Frente a un contexto fiscal restrictivo, se vuelve urgente una evaluación rigurosa que distinga entre las entidades que deben ser reformadas y/o fortalecidas.
[1] Nota metodológica: el “resultado económico” reportado por el BCRP corresponde a una medición en base caja, utilizada para fines fiscales. No debe interpretarse como equivalente a la utilidad neta contable del Estado de Resultados.
[2] El ROE de Electroperú fue de 9.7% en 2023, mientras que en 2022 fue de 16.9%. Por otro lado, la utilidad neta pasó de ser S/ 475.3 millones en 2022 a S/ 260.2 millones en 2023, según la memoria anual 2023 de Electroperú.
ARTÍCULOS RECOMENDADOS
- Comercio Exterior
- Infraestructura
- Economía
- Logística
- Competitividad
Tregua arancelaria y sus efectos en el transporte marítimo
Tras meses de tensiones comerciales, la tregua arancelaria de 90 días entre EE. UU. y China abre una ventana temporal para el comercio marítimo, pero también plantea riesgos logísticos ante posibles incrementos de tarifas y congestión portuaria.
- Economía
- Gobierno
- Inflación
Nueva reducción de la tasa de referencia ¿Qué significa?
El Banco Central de Reserva del Perú (BCRP) redujo recientemente su tasa de interés de referencia en 25 puntos básicos, con lo que la llevó al 4.5% y la ubicó cerca del nivel neutral estimado. Esta decisión marca un giro en la política monetaria restrictiva aplicada durante el pico inflacionario pospandemia.