De acuerdo con cifras del Instituto Nacional de Estadística e Informática (INEI), en el periodo mayo-julio de 2019, el ingreso promedio mensual de la población con educación superior universitaria fue de S/ 2,779, lo que reflejó una caída del 0.7% con respecto al mismo periodo de 2018. Por su parte, el ingreso de la población con educación superior no universitaria reportó un aumento del 4.1%, al pasar de S/ 1,508 a S/ 1,570 para el mismo periodo de evaluación. ¿Qué hay detrás de estos resultados?

Al revisar la evolución del ingreso promedio mensual según nivel educativo, en el periodo mayo-julio de los últimos cinco años, se aprecia que la población con estudios superiores universitarios experimentó una desaceleración en el crecimiento de sus ingresos (con una caída en el último año), mientras que la población con estudios técnicos mantuvo una tasa de crecimiento positiva. Al respecto, Gloria Zambrano, directora general de Promoción del Empleo del Ministerio de Trabajo y Promoción del Empleo (MTPE), sostiene que, en los últimos tiempos, la demanda laboral estaría orientada hacia la población con estudios técnicos en un 80% y en un 20% hacia la población con estudios universitarios. Por ello, el MTPE viene promoviendo programas para que los jóvenes tomen una decisión informada acerca de su futuro laboral. Tal es el caso de Ponte en Carrera, plataforma web con información sobre la demanda y oferta laboral del país, desarrollada por el MTPE junto con el Ministerio de Educación e IPAE Acción Empresarial, y en la cual muchos jóvenes pueden observar los beneficios de estudiar una carrera técnica y así no estar sesgados por la idea popular que señala que es preferible estudiar una carrera universitaria.

De acuerdo con datos de Ponte en Carrera, las carreras técnicas mejor remuneradas son Ciencias de la Computación, Administración de Empresas y Contabilidad y Finanzas. Particularmente, aquellas carreras relacionadas con la computación son las que tienen un salario promedio mayor durante los primeros cinco años de egreso. Los egresados de estas carreras pueden llegar a ganar alrededor de S/ 2,800.

Según la Encuesta de Escasez de Talento 2018, elaborada por Manpower Group, un 43% de los empleadores peruanos señala que no puede encontrar las habilidades que necesita. Asimismo, un 28% considera que los postulantes carecen de experiencia y un 22% asegura que carecen de las habilidades técnicas y las fortalezas humanas requeridas para los puestos de trabajo. Frente a esto, un 39% de los empleadores estaría ajustando los requisitos educativos y de experiencia para cubrir los puestos de trabajo.

Asimismo, de acuerdo con los resultados del informe basado en la Encuesta de habilidades al trabajo (ENHAT) 2017-2018, elaborado por el Banco Interamericano de Desarrollo, un 60.4% de empleadores señala que la falta de habilidades técnicas específicas para la ocupación genera que existan vacantes difíciles de cubrir, lo que evidenciaría que las dificultades que enfrentan los empleadores serían producto de la falta de postulantes con habilidades acordes con los requerimientos de las empresas. Particularmente, un 25% de vacantes difíciles de cubrir corresponden a puestos dirigidos a profesionales con estudios técnicos.

Actualmente, existe la intención de promover la educación técnica por parte del Gobierno, ya que el Plan Nacional de Competitividad y Productividad (PNCP), en su objetivo prioritario 2, busca fortalecer el capital humano del país a partir de la elaboración de la Política Nacional de Educación Superior y Técnico Productiva, con el fin de asegurar la calidad y la correcta articulación de la educación superior y técnico-productiva. Esta política evaluará la gestión de las instituciones, a través del licenciamiento, la acreditación y la calidad del proceso formativo de logros de aprendizaje orientados al mundo laboral.

Estos resultados serían una primera señal de que el mercado laboral estaría demandando a más personas con estudios técnicos o que los centros laborales estarían eliminando sus prejuicios respecto de contratar a profesionales con educación superior universitaria en lugar de profesionales con educación superior no universitaria. El desarrollo de capital humano es una tarea primordial para impulsar el crecimiento económico del país.

En este contexto, el Gobierno debe responder a las necesidades del mercado laboral y promover programas para que todos los jóvenes tomen una decisión informada y tengan la posibilidad de estudiar aquellas carreras con una demanda creciente. Ya que la escasez de profesionales técnicos agrava la brecha laboral en el país, la promoción de las carreras técnicas es necesaria para eliminar por completo la sobrevaloración de las carreras universitarias y motivar a los jóvenes para que apuesten por una carrera técnica. La reducción de la brecha de habilidades en el mercado laboral mejorará la productividad y la competitividad del país.